Entre el éxito de su familia S21 y la buena acogida que ha tenido su Galaxy S20 FE del año pasadoSamsung se los prometió muy feliz con el lanzamiento de su nuevo Galaxy S21 FE. Al fin y al cabo, esta “Fan Edition” parece una fórmula imbatible, ¿no? Tomas las mejores funciones de tu teléfono insignia, haces algunos cortes aquí y allá… Y listo: éxito de ventas garantizado. ¡Viva el Galaxy S21 FE!
Pero parece que algo ha ido mal esta vez. O algunos problemas de producción han provocado que Samsung tenga que lanzar el teléfono mucho más tarde de lo esperado o los coreanos han sobreestimado el valor real de su nuevo teléfono inteligente. Dado que Samsung no suele cometer este tipo de errores, todo apunta a nuestro primer motivo.
No es que el S21 FE no sea un buen teléfono, porque lo es. Pero el que deja en evidencia a Samsung aquí es el propio Samsung. Que el Galaxy S21 FE cueste casi 200 euros más que su “hermano mayor” es la prueba viviente de que algo no ha ido como debería.
Y es que el S21 FE tiene bastantes cosas buenas que ofrecer. La primera, tu pantalla. Su panel OLED de 6,4 pulgadas tiene el tamaño justo. Es una pantalla lo suficientemente grande como para poder ver vídeos o jugar cómodamente, pero sin llegar a ser un móvil mastodóntico de esos que se acercan a las 7,6 pulgadas en la actualidad. Los colores y su definición son de la calidad a la que nos tiene acostumbrados Samsung y gracias a su tasa de refresco de 120 Hz es un placer hacerlo Desplazarse y navegar por el teléfono.
Por fuera no encontrarás grandes diferencias con el S21. Su pantalla es algo más grande (el S21 tenía una pantalla de 6,2 pulgadas), es algo más pesada (177 gramos) y sus acabados son de plástico en lugar de cristal. Pero sigue siendo un teléfono cómodo de sostener y tan agradable como discreto. Además, su acabado mate significa que no tendrás que estar todo el día limpiando tus huellas dactilares de la parte trasera del teléfono.
El S21 FE viene con un excelente procesador Snapdragon 888 y 6 GB de RAM, por lo que tendrás potencia suficiente para realizar todo tipo de tareas con el teléfono. Pero aquí está una de las cosas raras del S21 FE: viene con 2 GB menos de RAM que la versión más básica del S21. No es que esto vaya a ser una carencia diferencial, pero ciertamente es raro pagar más por un teléfono menos potente sobre el papel, aunque venga con un procesador Qualcomm en lugar del Exynos al que nos tiene acostumbrados Samsung.
En cuanto a la batería, no hay grandes objeciones al S21 FE. Sus 4.500 mAh te darán un día de uso intenso, pero se echa en falta que la pantalla tuviera una frecuencia de refresco dinámica como la del S21, algo que sin duda añadiría algo de autonomía al teléfono. El S21 FE admite carga rápida con cable de 25 W e inalámbrica de 15 W, básicamente los mismos números que ofrece Samsung en casi todos sus teléfonos. Eso sí, si quieres un cargador tendrás que comprarlo por separado.
El teléfono viene con Android 12 y la excelente capa de personalización de los coreanos, One UI 4.0. Esto se traduce en un sinfín de opciones de personalización diferentes con las que puede jugar como mejor le parezca, y una integración perfecta con cualquiera de los dispositivos del ecosistema de Samsung.
Donde no hay sorpresa es en las cámaras del S21 FE, ya que son prácticamente las mismas (con una excepción) que las que vimos en el S21.
La cámara principal del S21 FE es una lente de 12 MP f/1.8 capaz de brindarte imágenes coloridas con bastante buena definición. Tiene estabilización óptica y es un todoterreno absoluto que te dará buenos resultados incluso si eres un inepto para la fotografía.
Al igual que su hermano mayor, el S21 FE cuenta con una lente ultra gran angular de 12 megapíxeles, aunque con un sensor más pequeño. un poco más pequeños, pero las diferencias entre uno y otro son prácticamente imperceptibles. Con esta resolución, puede esperar resultados bastante decentes con buena luz, pero no cuente con que haga grandes maravillas cuando cae la noche.
Y llegamos al tercer objetivo en disputa: el teleobjetivo. Aquí hay un poco más de diferencia entre un teléfono y otro, ya que el S21 tenía un teleobjetivo de 64 MP y el S21 FE solo incorpora una lente de 8 MP. Eso sí, al menos tiene zoom óptico x3, y he de reconocer que los resultados son sorprendentes a pesar de tener mucha menos resolución.
En resumen
El S21 FE es un gran teléfono inteligente del que es difícil sacar los colores. Tiene un procesador sobresaliente, una interfaz totalmente personalizable, una bateria mas que decente y un puñado de cámaras versátil. Además, si ya tienes otro dispositivo Samsung puedes aprovecha al máximo todas sus funciones.
Pero… no podemos olvidarnos de que este teléfono tiene un precio inicial de 759 €. Por mucho menos dinero podemos hacer ahora mismo con el S21 o con el S21+, que son teléfonos que superan a los FE en rendimiento. Así que la conclusión es clara: el S21 FE tiene al enemigo en su propia casa.
A continuación puedes ver algunas fotos tomadas con el Samsung Galaxy S21 FE:
