Los astrónomos de nuestro planeta ahora puede respirar tranquilo después de que el Telescopio Espacial James Webb haya yo tengo implementar con éxito este fin de semana su espejo principal, concluyendo con éxito una de las partes más complejas y peligrosas de la misión.
El James Webb es sobre del telescopio espacial más grande de la historia (tiene el tamaño de una cancha de tenis), por eso tuvo que viajar plegado a bordo del cohete Ariane 5 que despegó el 25 de diciembre de la Guayana Francesa. Durante estas dos semanas ha estado desplegando parte de sus principales sistemas –como es delicado sombrilla– pero todavía tenía que ser puesto en su lugar el enorme espejo que captará la luz infrarroja del espacio profundo.
Ese espejo principal se divide en dos grandes paneles hexagonales (uno a cada lado). El primero de los paneles se desplegó con éxito el viernes pasado, mientras que el panel del lado derecho se colocó el sábado.
Todavía quedan dos semanas para que James Webb llegue el punto de Lagrange L2 del sistema Tierra-Sol, que se encuentra 1,5 millones de kilómetros de nuestro planeta. Una vez que llegue al punto L2, el Los motores del telescopio lo colocarán en una órbita de halo y desde allí donde puedes hacer tus observaciones con mayor claridad mientras permaneces protegido de peligros radiación solar.
Pero miEl trabajo de los ingenieros de la misión aún no ha terminado. Durante las próximas semanas y meses tendrán que alinear la óptica del telescopio y calibrar todos sus instrumentos para que todo funcione a la perfección. Una vez hecho esto, el James Webb estará listo para viajar en el tiempo y desentraña algunos de los misterios más importantes de nuestro universo, como la formación de las primeras estrellas y planetas. Sin duda, estamos ante desde uno de los momentos astronómicos más emocionante de las últimas décadas.