La aplicación de seguridad basada en virtualización (VBS) del sistema operativo consume muchos recursos.
A menudo sucede que, de repente, la computadora perder su velocidad y empezar a tardar más de lo habitual en cualquier proceso rutinario. La causa no siempre es un fallo de hardware, sino que hay ocasiones en las que el propio sistema operativo incluye aplicaciones que consumir muchos recursos. Uno de ellos es el Seguridad basada en virtualización (VBS).
La llegada de Windows 11 trajo varias novedades interesantes. Entre ellos se encuentra el uso de virtualización de hardware en las CPUs más avanzadas, lo que proporciona una capa extra de seguridadpero su uso supone un recorte de la productividad.
VBS es un devorador silencioso que está activado por defecto y funciona junto con Windows Defender para crear un espacio aislado en la memoria donde todo tipo de información se puede almacenar de forma segura en el sistema.
Esta es una característica de clase empresarial diseñada para proteger las PC corporativas mediante la creación de una región de memoria segura aislada del sistema operativo normal.
El sistema puede utilizar este ‘modo virtual seguro’ para alojar una serie de soluciones de seguridad, que brindan una mayor protección contra las vulnerabilidades. Pero, dependiendo del equipo, su uso puede implicar una pérdida de rendimiento de entre 5% y 25%. Especialmente para los jugadores.
Si de repente experimenta una caída en FPS cuando juega un juego o mientras edita un video, intente deshabilitar esta medida de seguridad, ya que probablemente lo solucionará.
Windows: cómo saber si VBS está activado
Lo primero es saber si está activo. Para aquellos que hayan actualizado desde una versión de Windows 10, el VBS estará inactivo. En cambio, quien completó la instalación desde cero o compró una computadora nueva, esto siempre estará funcionando.
Hay dos formas de dejar de consumir VBS. Una más sencilla y directa y la otra, más radical, solo recomendable en caso de que la anterior no haya dado resultado.
Para que aparezca, tendrás que abrir el cuadro de búsqueda de Windows. En el cuadro “Ejecutar”, que se abre al pulsar el botón Windows + R. En ese espacio tendrás que escribir “msinfo32” sin comillas.
Sin seleccionar nada, desplácese hacia abajo hasta que aparezca la línea que dice seguridad basada en virtualización, allí puede averiguar si VBS está habilitado, dirá “sí”.
La forma más sencilla de cortar sus acciones es hacerlo desde el propio antivirus de Windows. Así, en el panel de configuración, dentro del apartado “Seguridad del dispositivo”, tendrás que entrar en el “Aislamiento del núcleo” y desde allí, desactivar la función de integridad de la memoria.
Un método radical para mejorar la velocidad de un ordenador
Otra forma de deshabilitar esta función es deshabilitar por completo las funciones de virtualización de Windows. Tendrás que buscar “Características de Windows”, en el propio panel de Configuración y se abre un cuadro con varias opciones.
Bastará con desmarcar las siguientes casillas, si las tienes activadas y aplicar los cambios:
- Protección de aplicaciones de Microsoft Defender.
- Plataforma de máquinas virtuales.
- Plataforma de hipervisor de Windows.
Después de unos segundos, Windows le pedirá que reinicie la PC y luego de arrancar, verifique si el rendimiento ha aumentado.
SL