Si hay un concepto que se ha puesto de moda estos años en el mundo de los smartphones es el de los Flagship Killers. Ya sabes, esos teléfonos que prometen las mismas prestaciones de gama alta pero a un precio más “razonable”. Y si hay una marca que ha sabido desenvolverse bien en estas aguas es Realme, que ha presentado hoy su nuevo GT 2 Pro, su nuevo teléfono insignia con el que pretende hacer honor una vez más a ese apodo de Flahship Killer.
Desde el exterior, el teléfono es toda una declaración de intenciones: el diseño del GT 2 Pro es sencillamente espectacular. En un mercado en el que los móviles cada vez se parecen más entre sí, Realme siempre ha apostado por arriesgar (mención especial a sus GT anterior) y eso es algo que hay que reconocer. Pero con la trasera del GT 2 Pro se ha superado: es tan bonito como original.
Del resto de sus elementos de diseño, solo se me ocurren cosas buenas que decir. Llama la atención que a pesar de que el teléfono cuenta con una generosa pantalla de 6,7 pulgadas, no resulta incómodo manejarlo con una sola mano. La clave aquí es que la parte trasera no es de cristal, sino de biopolímeros, por lo que el smartphone tiene un peso muy moderado (189 g). Ah, y encima sin renunciar a tener un look premium. Esperemos que el resto de fabricantes tomen nota.
Solo pude encontrar una pequeña falla en el diseño impecable del GT 2 Pro. Aunque el teléfono tiene un recubrimiento protector Gorilla Glass Victus que lo hace tremendamente resistente a las caídas, es relativamente fácil sufrir rayones menores. La verdad es que no se puede decir que le haya dado mala vida al teléfono, y aun así ha habido algunos rasguños en la pantalla. Mi consejo: es posible que desee invertir en un protector de pantalla adicional.
Otra de las grandes virtudes del GT 2 Pro es su pantalla. El móvil Realme viene con una gran pantalla AMOLED 2K 120 Hz con tecnología LTPO 2.0. O lo que es lo mismo: su tasa de refresco se actualiza en función del contenido que tienes delante. Esto es algo que siempre viene bien para arañar un poco más la batería y es sin duda una de las características clave en los paneles superiores del mercado.
En cuanto a color, brillo y nitidez la pantalla es más que destacable, aunque lamentablemente todavía le falta un poco para atrapar a Samsung, la reina en esta categoría. Eso sí, si eres de los que usa el móvil para jugar, te encantará saber que tiene una frecuencia de muestreo táctil de 1.000 Hz y eso es algo que tampoco verás en muchos de sus rivales.
Y lo de los juegos no es algo baladí para Realme. Por lo tanto, han decidido colocar un Snapdragon 8 Gen 1, el procesador más potente de Qualcomm hasta la fecha, bajo el capó del GT 2 Pro. Secundado por 12 GB de RAM (también ampliable con memoria virtual) y con un impresionante sistema de refrigeración por cámara de vapor, el GT 2 Pro asumirá absolutamente cualquier juego o tarea que se le presente. Cuando se trata de especificaciones, el teléfono de Realme está incluso por delante del Samsung S22 ultraY eso ya son palabras mayores.
Y hablando de sus especificaciones… hay que hacer mención aparte a su batería. El GT2 tiene una batería de 5000 mAh. Hasta entonces, es posible que no veas nada especialmente llamativo. Pero cuenta con una carga rápida de 65W que cargará por completo tu teléfono en poco más de media hora. Tengo que reconocerlo: me da mucha tranquilidad saber que solo necesito 15 minutos de carga para tener varias horas de uso garantizadas. Y además de eso, el cargador está incluido con el teléfono. Punto y minipunto para Realme.
Donde incluso Realme sigue estando un paso por detrás de sus competidores es en el aspecto fotográfico. Ojo, no quiere decir que no haya mejorado con el paso de los años, pero el GT 2 Pro sigue sin ser el golpe sobre la mesa que necesitaba la marca china para mirar de frente a Samsung o Apple en lo que a cámaras se refiere.
La lente principal de 50 megapíxeles del G2 Pro, por ejemplo, es notable. Tiene estabilizador óptico, maneja un buen rango dinámico, tiene una nitidez más que decente (aunque no la mejor) y, aunque tiende un poco a la sobresaturación, creo que hace que las fotografías sean bastante parecidas a lo que están viendo mis ojos. Pero las grandes aportaciones fotográficas que tiene el GT 2 Pro se limitan un poco a su cámara principal.
Y es que la cámara gran angular no está nada mal. Es cierto que llama la atención y hasta interesante que tiene una amplitud de 150º, unos números por encima de lo que solemos ver en este tipo de cámaras, pero no es de esas cámaras que se ganan la ovación de la grada y menos cuando nos tenemos poca luz a nuestra disposición.
Una lente de microscopio de 40x completa el conjunto de cámaras. Ya vimos algo similar en el Find X3 de Oppo el año pasado y Mi conclusión sigue siendo lo mismo: es muy divertido jugar con él durante unos días, pero luego te olvidas por completo de que está ahí. Creo que hubiera salido un teléfono mucho más redondo si en lugar de la cámara microscópica hubiera incorporado un teleobjetivo.
En resumen
Una vez más, Realme ha establecido el estándar de lo que debe hacer un buen Flagship Killer. El GT 2 Pro no tiene nada que envidiar en cuanto a diseño o prestaciones a los grandes móviles de este 2022. Es bueno, bonito y… ¿barato? Si lo comparamos con los de gama alta que hay en el mercado -y que a estas alturas todos sabemos que superan generosamente los mil euros- podríamos decir que quizás sí. Pero 749 € por su versión de 8 GB de RAM o 849 € por la versión de 12 GB sigue siendo un desembolso considerable para un teléfono. Eso sí, si aprovechas para reservarlos ahora, podrás conseguirlos por 100 euros menos cada uno.
