Cuando hace un par de años Samsung decidió matar su icónica línea de teléfonos Note, muchos se llevaron las manos a la cabeza. Sin embargo, no sabían que lo que estaba pergeñando la compañía coreana era un movimiento bastante lógico: integrar las bondades del Note dentro de su familia “S” y abandonar por completo la idea de lanzar dos flagships distintos durante el año.
Hoy, ese viejo Note se encuentra bajo el sobrenombre Ultra y tiene virtudes como para conquistar a los más exigentes de cada casa. ¿Quieres el mejor set de cámaras que un móvil Android puede ofrecer? Check. ¿Potencia? De eso también hay un rato. ¿Actualizaciones aseguradas durante años? No worries, y además llévate este stylus de regalo. Parece obvio dónde está la pega: el S22 Ultra cuesta la friolera de 1259€ (en su versión más básica), así que no está al alcance de muchos bolsillos.
Si eres uno de los afortunados que puede permitirse un capricho así o sencillamente quieres saber todas las innovaciones que ha conseguido empaquetar Samsung en un móvil bestial, te invito a que sigas leyendo.
Diseño a lo grande
Aunque Samsung ha mantenido un diseño muy continuista con respecto a los móviles que lanzó el año pasado, se ha decidido soltar un poco más la melena en lo que respecta al S22 Ultra. El módulo trasero, por ejemplo, ha desaparecido por completo para dejar solo los agujeros de las cámaras, dejando una parte trasera completamente limpia. Eso sí, por muy bonito que haya quedado el chasis del teléfono, da cosita llevar todas esas cámaras ahí desprotegidas.
No nos engañemos. El S22 Ultra es grande. Muy grande. El teléfono cuenta con una pantalla de 6,8 pulgadas y ni más ni menos que 227 gramos de peso. No voy a decir que no se noten, pero hay que reconocer que, pese a sus dimensiones, el S22 Ultra no resulta incómodo de sostener gracias a la ligera curvatura que tiene el teléfono en ambos lados. De todas formas, para utilizarlo cómodamente probablemente tengas que hacer uso de las dos manos.
De propina, el móvil viene con una capa de Gorila Glass Victus+ (puedo decir de primera mano que resiste bien las caídas), cuenta con un sensor de huellas y un reconocimiento facial que van como un tiro y viene con un recubrimiento mate la mar de vistoso.
Pero aun no hemos hablado del elemento que lo convierte de facto en el sucesor del Note: el stylus. Si nos asomamos a la parte inferior del teléfono, veremos que el famoso lápiz óptico de Samsung (el S-Pen para los amigos) se encuentra completamente integrado en el cuerpo del S22 Ultra, al igual que ya sucedía con el Galaxy Note 20. ¿Lo mejor? que pese a tener el stylus incrustado, el teléfono cuenta con resistencia al agua IP68.
Un stylus cargado de funciones
Y ahora hablemos del stylus. Voy a ir con la verdad por delante: no soy fan de este tipo de dispositivos. Ojo, no digo que no sea útil (hablaremos ahora sobre las cosas que puedes hacer con él), sencillamente yo no encuentro situaciones en mi vida cotidiana donde le vaya a dar uso. Pero este stylus viene cargadito de funciones y quizás alguna te haga a ti la vida más fácil.
Tan rápido como sacamos el S-Pen del teléfono aparece un desplegable con todas las funciones que tenemos a nuestra disposición. Y no solo eso: a ese menú contextual podemos añadir accesos directos a las apps de nuestro teléfono que prefiramos. Por lo que, si por ejemplo, utilizas el S-Pen para pintar, puedes abrir tu app de dibujo favorita tan solo unos instantes después de haber sacado el stylus.
Con el S-Pen podremos hacer de todo, desde tomar notas (y traducirlas mágicamente a texto), a sacar capturas o GIFs de la parte de la pantalla que marquemos o incluso traducir textos a diversos idiomas. Samsung ha conseguido reducir la latencia del S-Pen hasta los 2,8 milisegundos, por lo que todo lo que hagas sobre la pantalla con el stylus será prácticamente instantáneo.
Por si estas funciones te parecen poco, todavía podemos configurar el S-Pen para que realice determinadas tareas cuando hagamos ciertos gestos en el aire con el stylus. Elige lo que más te convenga: desde abrir un app concreta a navegar por el teléfono. Ah, ¿y he dicho ya que puedes utilizar el S-Pen como disparador remoto para la cámara? La verdad es que funciones no le faltan, solo que no a todo el mundo le pueden servir por igual
La mejor pantalla del mercado
Esto no debería ser ninguna sorpresa después de tantos años fabricando estupendos paneles, pero Samsung lo ha vuelto hacer: la pantalla del S22 Ultra es sobresaliente a todos los niveles. El S22 Ultra trae una pantalla AMOLED QHD+ a la que en términos de nitidez y color es prácticamente imposible encontrarle ninguna pega. También cuenta con una tasa de refresco adaptativa que ajusta los hercios en función del uso que le estés dando, algo que siempre viene bien para rascar algo más de autonomía al teléfono. Pero lo que es simplemente impresionante es que la pantalla tiene un brillo máximo de 1750 nits, por lo que podrás ver el teléfono a la perfección aunque caiga un sol de justicia.
De hardware, como habrás podido imaginar, tampoco es que vaya mal el Ultra. Es una pena que la versión que se comercializa en Europa no cuente con un Snapdragon 8 Gen 1, pero el Exynos 2200 (un procesador made in Samsung) también cumple con su cometido. Aun así, con este procesador no te faltará potencia para el 99% de tus actividades. Esta versión que estamos probando cuenta con 8 GB de RAM, pero si estás dispuestos a rascarte un poco más el bolsillo (1359 €) podrás hacerte con 4 GB de memoria más.
Donde quizás no brille tanto el S22 Ultra es en el apartado de la batería. Aunque el S22 Ultra cuente con una tasa de refresco variable y algún truco más de software con el que rescatar algo de autonomía, sus 5000 mAh dan para un día de aguante y poco más. No se si seré el único que se siente así, pero después de haber probado la carga rápida de otros teléfonos, la del S22 Ultra (45W) se me hace especialmente lenta. Por mucho que una mayor velocidad de carga pueda degradar más rápido la batería, creo que estaría dispuesto a renovarla cada ciertos años a cambio de no tener que pasarme dos horas enteras cargando el teléfono. Y luego está el ligero detalle de que por mucho que te hayas gastado 1250 euros en un móvil, el cargador no venga incluido. Ya se que ahora es lo normal y que si tienes ese dinero para el teléfono puedes permitírtelo, pero es algo que me sigue pareciendo una broma de mal gusto.
Las cámaras
Sobre el papel, no ha cambiado gran cosa de la disposición de cámaras que estrenó Samsung el año pasado en su modelo Ultra. Sus lentes son las siguientes:
- Cámara principal: 108 megapíxeles (83mm), f/1.8 con OIS.
- Ultra gran angular: 12 megapíxeles (120mm), f/2.2.
- Teleobjetivo 1: 10 megapíxeles (35mm), zoom óptico 3x, f/2.4 con OIS.
- Teleobjetivo 2: 10 megapíxeles (10mm), zoom óptico 10x, f/4.9 con OIS.
- Sistema de enfoque láser
Puesto que prácticamente hablamos de las mismas cámaras del S21 Ultra, no es de extrañar que lo que aprendimos el año pasado se mantenga. Rara vez me encuentro con que la fotografía que he tomado no se corresponde en términos de luz y de color con la realidad. Su sistema de enfoque láser, que tanto alabamos por aquí el año pasado, sigue siendo una completa virguería y con estas cámaras y los trucos de software de Samsung, no hace falta ser un absoluto experto para tomar buenas fotos.
En lo que respecta a las lentes, los dos teleobjetivos me siguen dejando con la boca abierta por sus buenos resultados. Es verdad que a partir del zoom 30x difícilmente podrás sacar una foto pasable (puedes llegar hasta un 100x con su zoom híbrido), pero resulta increíble la cantidad de detalles que puedes observar disparando desde mucha distancia.
A la cámara principal también es difícil ponerle alguna pega. Con esos 108 megapíxeles tendrás definición más que de sobra, y verás que el procesado de Samsung hace maravillas para estirar al máximo el rango dinámico de las fotografías. Si te interesa, puedes disparar con los 108 megapíxeles del sensor, aunque eso significa que nada de pixel binning, así que el teléfono tendrá más dificultad a la hora de interpretar las luces de la imagen.
La cámara gran angular, como suele ocurrir en la gran mayoría de móviles, es sin duda la lente que más flojea, pero aun así conseguirás buenas fotografías con ella.
La cámara selfie de 40 megapixeles sorprende por su definición y su modo retrato funciona tan bien como el de la trasera.
Gracias al SoC de 4 nanómetros del Exynos 2200, Samsung ha podido incorporar unas cuántas mejoras de software en el apartado fotográfico. No solo los algoritmos de procesado funcionan mejor sino que ahora tenemos algunas opciones de edición a mano como las que lanzó hace unos meses Google con sus nuevos Pixel 6. Aun así, tiene opciones con margen de mejora como el Modo Noche.
Ahora, con solo un par de toques, podrás eliminar objetos no deseados de la fotografía, cambiar los modos de desenfoque o quitar las sombras de una imagen. Además, gracias a la aplicación Expert Raw de Samsung (hay que descargarla específicamente de su Store) podrás disparar en RAW con todas las lentes del teléfono y ver ciertos parámetros in situ de la cámara.
El software
El Galaxy S22 Ultra ejecuta la última versión de Android 12 junto a la capa de personalización de Samsung, One UI 4.1. Básicamente One Ui tiene un millar de opciones diferentes que te permiten configurar el teléfono como te venga en gana y además ha sido optimizado para integrar de forma cómoda funciones como las del S-Pen.
Cabe destacar también que la integración del S22 Ultra con otros dispositivos Samsung va tan bien como cabría esperar y que, si te animas, incluso puedes tratar de usar el móvil como si de un PC se tratase gracias a Samsung Dex.
En resumen
Al final, todo se reduce a lo que estés dispuesto a gastarte. Si el dinero no es un problema, difícilmente vas a toparte este año con un teléfono Android que sea tan completo como el S22 Ultra. El móvil de Samsung tiene de todo: desde un particular stylus a un conjunto de cámaras sobresaliente, pasando por la mejor pantalla del mercado. Sin embargo, si crees que no le sacarás tanto provecho al stylus y quieres controlar un poco más tu presupuesto, posiblemente te baste y te sobre con uno de sus hermanos pequeños.