La nueva versión del cristal protector estaría incluida en el iPhone 15 y el Samsung Galaxy S23.
A pesar de la carcasa de goma y los geles protectores, si el teléfono golpea el suelo de lleno desde más de un metro y medio, las posibilidades de sobrevivir al impacto son escasas. Sin embargo, el nuevo cristal protector de los Galaxy S23 y iPhone 15 podría proteger las pantallas de caídas en superficies superrígidas.
La solución ya se conoce, es la nueva versión del Vidrio gorila, el Victus 2, y que según su fabricante, puede resistir una caída hasta un metro en superficies duras como el hormigón.
Cabe mencionar que las versiones anteriores del vidrio también protegían caídas de hasta un metro, pero esta es la primera que puede soportar superficies tan duras como el concreto.
Según el informe publicado en la web Trusted Reviews, esta nueva generación mantiene la misma resistencia a los arañazos que la primera tecnología de pantalla Victus.
“Lo que hemos aprendido con el tiempo es que alrededor del 75% de las fallas por caída ocurren en superficies rugosas: asfalto o granito u hormigón”, dice Scott Forester, vicepresidente de la empresa.
Corning aún no ha desvelado qué smartphones serán los primeros en traer este cristal protector, aunque es probable que el Samsung Galaxy S23 Ultra, como ocurre con las versiones anteriores, lo adapte para sus pantallas.
Además, Apple es un inversor importante en Corning y la gama iPhone 14 tiene a Victus a bordo. Es casi seguro que eso significa que el iPhone 15 del próximo año estará equipado con Victus 2.
Actualmente, el Sony Xperia 5 IV, Google Pixel 7 Pro y OnePlus 10T están equipados con Gorilla Glass Victus, por lo que es probable que la próxima generación de esos teléfonos también obtenga una actualización. En general, la compañía dice que Gorilla Glass ahora se ha utilizado en 8 mil millones de dispositivos. por 45 marcos.
Qué hacer si la pantalla del celular está rota
Si en la caída lo que se astilló fue el cristal pero no la pantalla, que es el componente más caro del equipo, se puede seguir utilizando, dependiendo del desperfecto, aunque también es posible cambiarlo. sin afectar la operación.
En este punto aparece el dilema económico: conviene apostar por una costosa reparación, que en equipos nuevos representa el 15% de su valor de compra, o directamente, dar el salto a un nuevo modelo.
La respuesta es sencilla, si tiene más de dos años, no es de gama alta y empezó a dar signos de deterioro -poco espacio, lentitud, falta de memoria- conviene apostar por un nuevo modelo.
En cambio, si tiene menos de un año, independientemente de la gama, tendrás que consultar al servicio técnico el coste de la reparación que, según el tamaño y tipo de pantalla, empieza en los 10 mil pesos.
Y aunque representa un gasto enorme, hay que tener en cuenta que ese mismo equipo tiene un valor de 90 mil pesos. Aunque también hay opciones más económicas.
Si el celular enciende pero no enciende la pantalla, para recuperar la información se tendrá que conectar el dispositivo a la PC. En el caso de Android, se puede acceder a datos como fotos y archivos de texto.
SL
