El mundo del trabajo posterior a la pandemia ha visto la adopción del trabajo híbrido en prácticamente todas las empresas casi como una cuestión de rutina, y adaptarse a sus desafíos ha sido la tarea más importante de la alta dirección, según ha descubierto una investigación de Mazars.
El barómetro de la suite C El estudio de la asociación integrada que se especializa en servicios de auditoría, contabilidad, asesoría, impuestos y legales fue diseñado y realizado en colaboración con GQR Research, recopilando datos a través de una encuesta en línea de 1130 ejecutivos entre el 24 de septiembre y el 25 de octubre de 2021.
Fundamentalmente, el estudio destacó cómo la tecnología ha demostrado ser el núcleo del crecimiento empresarial, ya que los equipos ejecutivos han buscado adaptarse a entornos de trabajo remotos y gestionar las presiones laborales y del mercado persistentes. Encontró que poco más de dos tercios de los líderes esperan pasar por una transformación tecnológica en los próximos tres a cinco años, lo que demuestra que esta transformación tecnológica apenas está comenzando.
Se encontró que las tendencias tecnológicas están muy presentes en los radares de los ejecutivos, con poco más de la mitad (53 %) esperando que las tendencias tecnológicas y de innovación tengan un gran impacto en su negocio en los próximos tres a cinco años. Como tal, el 82 % planea aumentar la inversión en el mantenimiento y la evolución de los sistemas de TI.
Al observar cómo los líderes empresariales pueden adoptar la revolución tecnológica inminente y posicionar mejor a su organización para el éxito, la mitad de los encuestados cree que el trabajo remoto será un cambio a largo plazo para su negocio y la otra mitad espera un aumento del trabajo remoto o flexible.
Además, el 45% dijo que adaptarse al trabajo remoto fue el desafío más importante causado por la pandemia, y casi la mitad lo mencionó entre sus tres principales interrupciones.
Sin embargo, a medida que aumenta la dependencia de la tecnología y los datos, también lo hacen los riesgos de seguridad cibernética: el 54 % de los encuestados señaló que el riesgo de seguridad cibernética para su organización ha aumentado en los últimos 12 meses, y el 35 % cree que una violación de datos significativa en los próximos 12 meses es probable. Mazars aconsejó que crear una estrategia de seguridad cibernética desde el principio era esencial para estar preparado para estos riesgos.
En el futuro, se destacaron tres desafíos clave para el C-suite, a saber: una “guerra” por el talento; llevar la tecnología a la sala de juntas; y el riesgo asociado con la transformación.
Específicamente, el estudio señaló que la cantidad de personas que realmente entienden cómo lograr con éxito la transformación digital es finita y, como tal, la demanda de estas personas se está calentando.
Sin embargo, muchas salas de juntas carecen de la experiencia técnica necesaria para implementar una estrategia eficaz para la transformación digital, y reforzar el conocimiento tecnológico en la sala de juntas puede ayudar a guiar a una organización en la dirección correcta.
Mazars concluyó advirtiendo que al desarrollar una estrategia digital que establece cómo abordar las oportunidades en torno a la transformación digital, era imperativo no perder de vista los riesgos asociados.