Facebook acordó pagar más de 14 millones de dólares para resolver las acusaciones de la era Trump de que discriminaba a los trabajadores estadounidenses cuando ocupaban puestos de trabajo lucrativos, dijo el martes el Departamento de Justicia.
Según los fiscales federales, Facebook había reservado más de 2.600 puestos de trabajo en Estados Unidos, la mayoría de los cuales pagaban salarios de seis cifras, para trabajadores nacidos en el extranjero con visas temporales.
La compañía “se negó” a considerar a ciudadanos estadounidenses para los trabajos en violación de las leyes contra la discriminación, dijeron los fiscales en la demanda presentada en diciembre.
Según el acuerdo del martes, Facebook pagará una multa de $ 4,75 millones al gobierno de Estados Unidos y pagará hasta $ 9,5 millones a las presuntas víctimas de la discriminación.
También se requerirá que el gigante de las redes sociales dirigido por Mark Zuckerberg brinde a sus empleados capacitación contra la discriminación y haga un mayor esfuerzo para reclutar trabajadores estadounidenses.
Si bien el acuerdo representa una gota en el agua para una empresa que obtuvo $ 86 mil millones en ingresos el año pasado, los fiscales federales declararon la victoria.
“Facebook no está por encima de la ley y debe cumplir con las leyes federales de derechos civiles de nuestra nación, que prohíben las prácticas discriminatorias de contratación y reclutamiento”, dijo la Secretaria de Justicia Auxiliar Kristen Clarke.
“Las empresas no pueden reservar ciertos puestos para los titulares de visas temporales debido a su ciudadanía o estatus migratorio”, dijo. “Este acuerdo refleja el compromiso de la División de Derechos Civiles de responsabilizar a los empleadores y erradicar las prácticas laborales discriminatorias”.
“Estas resoluciones nos permitirán continuar enfocándonos en contratar a los mejores constructores tanto de Estados Unidos como de todo el mundo, y apoyar a nuestra comunidad interna de titulares de visas altamente calificados que buscan residencia permanente”, dijo un portavoz de la compañía.
En una declaración a The Post, un portavoz de Facebook negó haber actuado mal, pero dijo que estaba contento de “seguir adelante” después del acuerdo.
La noticia llega cuando Facebook enfrenta un mayor escrutinio en Washington, DC, luego de que la denunciante Frances Haugen llamara la atención sobre los efectos de Instagram en la salud mental de los adolescentes.
Los detalles de la supuesta colusión en el mercado publicitario entre Google y Facebook también se harán públicos esta semana, lo que, según los observadores, podría alimentar un creciente apetito político por acciones antimonopolio contra las empresas.